Hartos de los ERTE sin compensación ni definición

Fecha: 16 May 2020

Vaya por delante que los ERTE están salvando la economía de las familias de esta tierra. Es incontestable que es un mecanismo ideado para mantener el empleo y para que las personas trabajadoras tengan protección social.

 Pero en estos momentos tan duros que vivimos como sociedad, UGT quiere que se solucione la injusta manera con la que se están calculando las prestaciones de paro para el personal fijo discontinuo del sector aéreo de Balears.

 Una parte importante de las personas fijas discontinuas incluidas en los ERTE de los aeropuertos del archipiélago está cobrando un paro de miseria, entre 48 y 300 euros mensuales.

 Aunque no queremos buscar culpables, sino remedios, no podemos dejar de denunciar que en algún lugar de la cadena o el algún despacho se ha malentendido e infravalorado la labor que estos profesionales desarrollan para que funcione el sector turístico.

La figura del fijo discontinuo se entiende en Balears y en muy pocos sitios más. Para los que hacen los cálculos de la protección social solo existe personal indefinido y eventual. Pero tienen que tener en cuenta que los fijos discontinuos del sector aéreo son únicos en toda su peculiaridad y gracia, o en este caso, desgracia.

 Este colectivo está doblemente penado. Antes del Covid estaba sumido en una contratación de precariedad extrema, y ahora, en no pocos casos, cobra prestaciones indignas. Esto se tiene que arreglar, y el Servicio Estatal de Empleo debe atender a la idiosincrasia del personal fijo discontinuo de los aeropuertos de Balears, y no dejarles con prestaciones con las que es imposible sobrevivir. UGT no desfallecerá hasta lograrlo.

 La temporada para los fijos discontinuos de los aeropuertos de las Islas no empieza ni termina con jornadas de 40 horas, sino con contratos de 10 a 20 horas. Se van ampliando a medida que aumenta la actividad. Hay fijos discontinuos con más de 20 años de antigüedad que no tienen aseguradas jornadas completas durante los meses más fuertes, de marzo a octubre.

 El personal de tierra y asistencia de los aeropuertos ha llegado a esta situación por la liberalización de las concesiones y los autohandlings. AENA es la gran culpable de la precariedad. Las empresas solo son responsables de su pasividad y de su falta de compasión con su personal.

 Apelamos a la empatía de las almas que están dirigiendo la vida de la gente en estos momentos de pandemia. UGT quiere que se solucione la miseria que están cobrando no pocas personas que componen el personal fijo discontinuo de Son Sant Joan, del aeropuerto de Menorca y el de Eivissa. Son las trabajadoras y los trabajadores que representan la puerta de entrada del turismo en esta comunidad.

 El cálculo de las prestaciones debe hacerse en base a los últimos 180 días trabajados. Se tiene que contemplar la media global para cuantificar el dinero que cobrarán del paro los fijos discontinuos del sector aéreo durante el ERTE, y no aplicar un coeficiente de jornada basado en el contrato base de inicio de temporada, que es de muy pocas horas. Y es que las jornadas varían constantemente, como en Semana Santa.

 Además, hay fijos discontinuos que no habían comenzado la temporada y que han pasado de cobrar un paro de unos 900 euros a uno de 200 euros al ser incluidos en el ERTE. Es intolerable, pero se puede resolver con diálogo, voluntad y sensibilidad.  Es tan sencillo como hacer los cálculos sobre las bases de cotización de los últimos 180 días trabajados.

 José Manuel Peces, sector Transporte de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT