Las mujeres pensionistas de Balears están cobrando de media casi un 33% menos que los hombres y esto a pesar de que son mayoritarias en la percepción de más de una pensión, según el estudio de UGT ‘Brecha salarial en las pensiones. La discriminación salarial más allá de las pensiones’.

La secretaria de Políticas Sociales e Igualdad de UGT, Xisca Garí, ha subrayado durante la presentación del estudio en rueda de prensa que las brechas de género se “arrastran toda la vida” y que las desigualdades salariales que sufren las mujeres en su etapa laboral se reproducen durante la jubilación.

La brecha de género en el conjunto de pensiones cercana al 33% implica que las pensionistas del archipiélago cobran 5.167 euros menos al año que los hombres, con los datos correspondientes a octubre de este año.

Si nos fijamos en las pensiones de jubilación, son mujeres el 42% de las personas que cobran una pensión en las Islas, y soportan una brecha del 31,7%, un punto superior a la media estatal. En este caso, Baleares ocupa la octava brecha más elevada del país.

“Las brechas descienden en todas las comunidades autónomas cuando se trata de pensiones de jubilación, pero siguen siendo muy elevadas. Dejan patentes las desigualdades que han existido y existen en el mercado laboral”, ha indicado Garí.

Ha añadido que las brechas se reducen “muchísimo” en las pensiones de personas que han sido autónomas o que han tenido contratos en el empleo doméstico al ser las cotizaciones más bajas para ambos sexos. Aún así, Garí ha destacado que existe una “alarmante” brecha de género en todos los tipos de pensión, excepto en las de viudedad.

Y es que a diferencia del resto de pensiones, las de viudedad son las únicas en las que cobran más las mujeres que los hombres porque la pensión de viudedad depende del trabajo del cónyuge fallecido y eran los hombres los que tenían trabajo asalariado.

Las viudas de Balears son las que perciben las segundas pensiones más bajas del Estado, con una media de 656 euros mensuales, por detrás de las de Galicia y alejadas de la media estatal, que es de 731 euros.

Garí ha señalado que la posición de las pensiones de viudedad en el archipiélago está relacionada con la relevancia que ha tenido el sector servicios, la construcción y la modalidad del contrato de fijos discontinuos.

Sobre las causas de las brechas de género en las pensiones, la responsable de Políticas Sociales e Igualdad ha apuntado a las “desigualdades” en la vida laboral de hombres y mujeres.

“El empleo de las mujeres es peor que el de los hombres, y los sectores más feminizados están peor valorados y, por tanto, peor pagados que los masculinizados”, ha profundizado Garí.

Ha continuado señalando otros factores como la mayor concentración del trabajo a tiempo parcial entre las mujeres y el hecho de que son estas las que piden las excedencias para el cuidado de menores u otros familiares.

Entre las medidas defendidas por UGT para combatir las brechas en pensiones destaca la derogación de la reforma laboral de 2012 y la de pensiones de 2013, así como la aprobación de una ley de igualdad salarial y la edificación de escuelas infantiles y residencias para que las mujeres no tengan que elegir entre trabajar o cuidar a su familia.

“Proponemos un nuevo sistema de jubilación que tenga en cuenta a las mujeres e introduzca medidas correctoras de las desigualdades. Hay que evitar la doble penalización que tenemos las mujeres”, ha resumido Garí.

UGT reclama que el futuro Gobierno extienda la sentencia del Constitucional que declara nulo el coeficiente reductor de parcialidad para las jubilaciones a las penalizaciones en la prestación de desempleo y los casos de incapacidad.

Otras peticiones del sindicato están relacionadas con estudiar el incremento de un 5% de las pensiones a las madres con un hijo y no solo a partir de dos, como actualmente, y el reparto de cotizaciones entre los miembros de la pareja si una mujer reduce su jornada por motivos familiares y su cónyuge continúa trabajando a tiempo completo.